Tragedia: Procesan a un padre de familia por descuidar a su hijo, que murió ahogado en una noria

Seguridad

Santa Cruz, 25 de mar (Tinta Roja).- La población beniana de Riberalta está conmocionada por una tragedia. Un niño de dos años y nueve meses perdió la vida tras caer en una noria (pozo de agua), mientras estaba bajo el cuidado de su padre. La Fiscalía Departamental de Beni abrió una investigación por homicidio culposo y procedió a la aprehensión del progenitor, Joel P.R., para esclarecer los hechos.

Según informó el fiscal departamental, Gerardo Balderas Arteaga, las primeras investigaciones señalan que el progenitor dejó solo a su hijo, pese a que estaba bajo su supervisión, y se dirigió a la casa de su vecino. Ocurrió la tarde del domingo 23 de marzo.

Durante el descuido del padre, el menor habría caído dentro de una noria. Otro niño que vivía en la vivienda contigua fue quien alertó del hecho a la madre, que rescató a su hijo e inmediatamente lo llevó al Hospital Materno Infantil de Riberalta, pero lamentablemente el niño llegó sin signos vitales.

«Dentro de los actos investigativos preliminares se realizó el acta de levantamiento legal del cadáver, informe médico que señala como causa de muerte ahogamiento por sumersión, acta de regia del lugar del hecho y declaración de testigos que aportaron información de lo sucedido, mismos que serán fundamentales para establecer responsabilidades por el fallecimiento del menor de edad”, aseveró Balderas.

El fiscal del caso, Manuel Barroso, detalló que se realizaron los procedimientos investigativos iniciales, incluyendo el levantamiento legal del cadáver, el informe médico que confirmó la causa de muerte por ahogamiento y la toma de declaraciones a testigos clave que presenciaron los hechos.

Mientras la población de Riberalta lamenta la pérdida, la investigación sigue su curso para determinar si Joel P. R. enfrentará cargos formales. La tragedia deja una dolorosa lección sobre la importancia de la vigilancia constante cuando se trata de los más vulnerables.

“La información recolectada será fundamental para establecer responsabilidades. Es una tragedia que nos recuerda cuán frágil puede ser la vida de los más pequeños cuando hay descuidos”, señaló Balderas.

El Deber

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *