Brasilia, 05 de mayo (Tinta Roja).- La cantante Lady Gaga ofreció un espectáculo histórico en la playa de Copacabana, Río de Janeiro, congregando a más de dos millones de personas en un concierto gratuito que marcó un récord de asistencia. La artista, conocida por su activismo y su defensa de la diversidad, cautivó al público con su energía y talento, convirtiendo la noche en una celebración inolvidable.
Sin embargo, el concierto estuvo marcado por un operativo de seguridad sin precedentes. La Policía Civil de Río de Janeiro, en conjunto con el Ministerio de Justicia, informó que logró frustrar un atentado con bomba que habría ocurrido durante el evento. Según las autoridades, el ataque fue planeado por un grupo que promovía discursos de odio y buscaba notoriedad en redes sociales mediante la radicalización de jóvenes. Dos personas fueron detenidas, incluyendo el presunto cabecilla de la trama y un adolescente.
La operación policial fue bautizada como Fake Monster (falso monstruo), incluyó también nueve registros en otras tantas ciudades de cuatro estados (Río, San Paulo, Rio Grande do Sul y Mato Grosso) en los que fueron decomisados ordenadores, otros dispositivos electrónicos y documentación.
Agencias