La tragedia enlutó a la familia de Nelly Yovió, una madre soltera que cuidaba a sus cinco hijos y que se ganaba la vida vendiendo gasolina al raleo. La noche del domingo, la mujer se fue a la ducha y dejó una vela prendida que provocó un incendio.
Los cinco hijos de la mujer estaban en el cuarto, durmiendo, cuando comenzó el fuego. Una niña de 8 años falleció carbonizada, mientras una bebé de 8 meses, una adolescente embarazada de 17 años y otro menor de edad quedaron con graves heridas.
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Una de las tías de las víctimas, dijo que los tres heridos están internados en terapia intensiva y que la adolescente perdió a su bebé por la gravedad de sus heridas.
“El estado de mi sobrina es crítico, está en terapia, intubada, 80 % de su cuerpo está quemado. Lastimosamente perdió a su bebé”, dijo.
“Mi otro sobrino está en el hospital y la otra bebé también está en terapia”, relató la familiar.
Aseveró que solo en la adolescente se gastó cerca de 4.000 bolivianos y que para los otros dos también hay una lista de medicamentos que no pueden faltar.
“Pero en un enfermo no hay plata que aguante”, lamentó, por lo que pidió ayuda a la población.
La madre viajó a San Ramón a enterrar a la niña fallecida y dejó en la capital cruceña a sus hermanas para que puedan atender a sus otros hijos que están en terapia.
La familia pide ayuda para cubrir los gastos médicos y funerarios. Las personas que deseen ayudar pueden comunicarse a los números 650-24659 y 620-15357.
EJU